Hay autos que nacen para ser póster de habitación de niños y el modelo que por estos días se apropió de las paredes de medio planeta es el fabuloso TVR Sagaris. Nacido en una fábrica británica de deportivos artesanales adquirida hace dos años por un multimillonario ruso de sólo 24 años, es lógico que en TVR supieran interpretar el gusto de los púberes. ¿Pero cuál fue la reacción de los adultos? En pocos meses, el Sagaris acaparó el 40% de la producción de TVR y se convirtió en uno de los deportivos más elogiados por la prensa europea. El motor V6 turbo de 400 caballos, los 310 km/h de velocidad máxima, los escasos 1.100 kilos de peso y la carrocería cubierta con más tajos que Scarface ("Sagaris" llamaban los persas a sus hachas de guerra) son argumentos suficientes para incluirlo en esta lista.