Ayer terminó la edición 2006 de Autoclásica Argentina y los premios mayores del jurado fueron para el Vauxhall Velox 1923 ("Best of Show") y el Hispano Suiza 1928 ("Gran Premio Elegancia") de las fotos. Sin embargo, la nota destacada la dieron los autos de Ford. La mayoría de los modelos del óvalo elegidos por el jurado se quedaron al final sin el trofeo al fallar sus motores y no poder subir a la planchada de premiación por sus propios medios (requisito habitual en eventos internacionales de autos clásicos).

Los organizadores aprovecharon la debacle mecánica para lanzar chanzas y críticas a los modelos de la marca. La regla, en cambio, no se aplicó con la misma rigurosidad sobre la Ferrari 212 de Gregorio Pérez Companc, que recibió su premio a pesar de haber sido empujada por cuatro colaboradores por más de 500 metros.