Informe especial desde La Habana
Por Lupe Fuentes Macías
Fotos de Raúl Casas

Todo estuvo listo como hace 50 años con la precisión de un reloj, lo que en esta ocasión fue con la alegría de poder celebrar un nuevo aniversario del “secuestro patriótico” de Juan Manuel Fangio.

Del circuito del malecón habanero salieron los autos réplicas que participaron en la Operación Rambler (llamada cariñosamente por los captores como “La Gorriona”, Plymouth y Cadillac, así como un grupo de autos clásicos que visitan la Peña “Amigos de Fangio” de forma habitual.

En caravana llegaron hasta el Hotel Lincoln, situado en la populosa calle Galiano donde esperaban un numeroso grupo de combatientes del Movimiento 26 de julio, algunos de ellos participantes en el secuestro y la devolución; otros, miembros del Ejército Rebelde de la Sierra Maestra y hasta un fundador de la radio guerrillera, Radio Rebelde, que el día 24 de febrero de 1958 había sido inaugurada y dio la noticia en aquel entonces. Recibidos por Lorenzo Verdecia, coordinador de la Peña Amigos de Fangio, Jesús Pérez Balsa, gerente del Hotel Lincoln y Joel Avila, comercial de dicho hotel.

Con el poema del poeta El Indio Naborí declamado por Lupe Fuentes, promotora de la Peña dio inicio esta velada, que en sus versos finales enuncia: “y así la gran carrera que no hiciste en la pista, la hiciste entrando en nuestra historia”. Posteriormente, Angel Fernández Vila, quien participó como chofer cuando contaba solamente con 17 años de edad en la devolución de “El Chueco”, pronunció las palabras recordatorias de esta audaz acción del Movimiento 26 de julio hace 50 años y que fuera comandado por Faustino Pérez, ya fallecido, pero estuvo presente su viuda.

Todos los allí asistentes tuvieron el placer de visitar la habitación-museo de Juan Manuel Fangio, la cual es alquilada a personalidades que visitan el Hotel. En la misma se ofrecieron explicaciones por parte de la Relacionista Pública del Hotel Lincoln y por el propio Manuel Núñez, único partícipe en el secuestro que queda vivo.

De regreso, una sorpresa en el Circuito de la Fama. Después de 49 años de ausencia de Cuba nos visitó Alberto García Cifuentes, protagonista otrora del trágico accidente automovilístico ocurrido el 24 de febrero de 1958, precisamente en la carrera internacional a la que Fangio no pudo presentarse. Un ameno intercambio entre todos esos hombres en la develación de la losa de cerámica dedicada al Movimiento 26 de Julio, obra del artista de la plástica Otto Álvarez.

Como siempre, se bailó tango en la explanada del Circuito de la Fama. Las compañías “Edmundo Tango”, “Profesional Cubatango” y “Neo Tango” dieron colorido a la celebración. Las canciones cubanas en las voces de Juan Labrada, quien interpretó dos composiciones de Manuel Núñez (uno de los secuestradores), el siempre querido Damián, quien revive a Polo Montañes y que también incorporó a Noemí, su compañera.

Como colofón, las fotos inéditas captadas el lunes 24 de febrero de 1958 durante las carreras del II Gran Premio Automovilístico de Cuba por el lente de Orlando Morales, historiador de la escudería de autos clásicos “A lo cubano”. En las mismas, García Cifuentes pudo observar detenidamente los sucesos de aquel trágico día en el que salvó la vida milagrosamente, gracias al auxilio de otro corredor cubano, Elías Regalado.

Fue un memorable día, donde se unieron la bandera argentina y la cubana, donde se unieron nuestras culturas y donde le rendimos homenaje a todos aquellos que por derecho propio están en la historia.

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