Tal como lo habían demostrado durante la tanda de clasificación, los Peugeot 908 fueron los más rápidos en Le Mans, pero sólo hasta la hora 15 de la carrera. Durante una parada en boxes para cargar gasoil, el Peugeot de Jaques Villeneuve fue superado por el Audi R10 de Tom Kristensen, Rinaldo Capello y Allan McNish.

Para los ganadores no fue fácil, ya que a dos horas del final chocaron contra otro competidor pero se las ingeniaron para continuar sin mayores daños. Esta fue la quinta victoria consecutiva de Audi en esta competencia y la ocatava de Tom Kristensen.

Peugeot confiaba tanto en ganar esta competencia que, después de asegurarse los tres primeros puestos en la grilla de largada había presentado en la pista francesa el 207 Le Mans Series (foto de abajo), una edición limitada de dos mil unidades basada en el 207 RC.

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